SICILIA, José María
(Madrid, 1954)
El pintor José María Sicilia comienza su formación artística en la Escuela de Bellas Artes de Madrid y, en 1980, abandona sus estudios y se traslada a vivir a París donde coincide con Miquel Barceló y Miguel Ángel Campano, artistas que, junto al propio Sicilia, José Manuel Broto y Ferrán García Sevilla, se convertirían en los grandes protagonistas de una revitalización de la pintura española en la década de 1980 que se vinculó a la modernización de la recién nacida España democrática. A partir de 1984 realiza pinturas de gran tamaño en las que representa motivos figurativos utilizando recursos de gestualismo matérico procedentes de la pintura informalista. Son obras de gran dinamismo y potencia cromática. Sin dramatismo, pero con gran énfasis plástico, al modo de algunos expresionistas alemanes, organiza su trabajo en series sobre naturalezas muertas y paisajes. A mediados de la década de 1980 su obra alcanza una gran proyección nacional e internacional. Al mismo tiempo se traslada a Nueva York, e inicia un proceso de esencialización que lo aleja de los empastes que son característicos de su primer periodo madrileño. Esta evolución desde la figuración hacia los límites de la abstracción se concreta a partir de mitad de la década de 1990 con las obras de la serie Flores, en las que los motivos reducidos a lo esencial se vislumbran levemente a través de las capas de cera que constituyen la superficie del lienzo, dando como resultado una pintura de enorme carga lírica. Sicilia continua con esta investigación pictórica hasta comienzos del siglo XXI, cuando se decanta cada vez más, por un lado, por el dibujo y los materiales directos y, por otro, por la realización de esculturas e instalaciones.