PELAYO ORTEGA Y LA LUZ. LA ARQUITECTURA COMO LIENZO
TALLER EXPERIMENTAL DE LA FUNDACIÓN MARÍA CRISTINA MASAVEU PETERSON
El Taller Experimental se origina en torno a la arquitectura y a la luz, a Pelayo Ortega y al Palacio de Revillagigedo, en un ejercicio de interpretación casi contractual con la historia y la forma arquitectónica comprometidas con la contemporaneidad, abiertas a una concepción del pasado que se da a conocer en el presente.
La fidelidad de la Fundación a los objetos que la rigen vislumbró la oportunidad de unificar en un mismo proyecto la creación y difusión de Arte con la dimensión formativa becando a cuatro jóvenes y meritorios estudiantes del IED de Madrid (María Grande, Enrique A. Garde, Roberto Collado y José Luis García) tutelados por Carlos Brenes, coordinador de IED Madrid, y dirigidos por Tomás Peña, a.k.a SPAUN256, uno de los diseñadores nacionales con mayor proyección de los últimos años.
El Taller Experimental propicia el diálogo entre Pelayo Ortega y la Arquitectura del Palacio de Revillagigedo, en un intento por extraer de su alma de pintor sus percepciones y su sentir. Y a su vez, la obra de Pelayo Ortega es interpretada bajo tensión narrativa, dinámica y sugerente, por estos cuatro jóvenes estudiantes desde la fuerza creativa e intensidad de su campo formativo.
El dinamismo de las imágenes busca captar la atención del observador en un esfuerzo por invadir su interior de sensaciones, color, luz y emoción. Y el trabajo final, proyectado en la noche, a escala real sobre la fachada principal del Palacio de Revillagigedo, muestra una imagen nueva y sugerente de un espacio construido reconocible en nuestro subconsciente colectivo, tensado por una luz corpórea—nunca antes existente— y por una obra musical que desvela paisajes efímeros y mapas imaginarios, lecturas inéditas de la arquitectura de un edificio emblemático, que permanecían ocultas a nuestros ojos diurnos.
Así, en plena posesión del color, la fachada de piedra convierte la sensación de peso en ingravidez, y se despoja vibrante del eco del silencio y la oscuridad. Como dijo el gran arquitecto Louis Kahn: «La luz es dispensadora de toda presencia, sin ella sólo hay oscuridad «.
Palacio de Revillagigedo, Gijón. 18 de diciembre de 2008